Madre,
también yo quisiera ser mujer.
No para imaginarme tu odio
o tu amor, la noria de tu dicha
o el lastre de tu tristeza,
sino para sentir en mi interior
la necedad terrible de haber traído al mundo
a esta bestia maldita
y perdonarte,
madre.
[Tomás González]
Sem comentários:
Enviar um comentário